Gestión de desechos

GESTIÓN DE RESIDUOS

Replantear
          Reducir
Reutilizar
          Renovar
Recuperar

Replantear: el primer paso en nuestra estrategia de gestión de residuos es pensar en los residuos como un recurso potencial, en lugar de eliminarlos. No todos los materiales de desecho tienen el mismo potencial de reutilización, por lo que se evitan los materiales de baja calidad en lugar de aquellos con mayor potencial para una segunda vida. Además, se consideran la toxicidad, la energía incrustada y otras propiedades del material.

Reducir: si bien somos consumidores conscientes e intentamos evitar comprar productos con un embalaje excesivo, no es posible evitar todos los materiales y desperdicios no deseados. En muchas áreas, como alimentos y artículos para el hogar, es muy fácil comprar a granel y llevar nuestros envases reutilizables. Sin embargo, las herramientas, la electrónica y los materiales de construcción a menudo vienen en un embalaje especial que es necesario para proteger el producto. Intentamos limitar la cantidad de desechos inorgánicos (plástico, metales, vidrio, etc.) tanto como sea posible, ya que es más difícil de procesar o eliminar. Durante el desarrollo inicial de la infraestructura, nuestro flujo principal de residuos son los residuos de la construcción. Los desechos que no podemos manejar en el sitio deben transportarse a la ciudad más cercana para su eliminación (quema o vertedero), lo que limitamos tanto como sea posible.

Reutilizar: reutilizamos y reciclamos la mayor cantidad posible de materiales de desecho inorgánicos, y almacenamos muchos materiales como fuentes de alimentación futuras para materiales técnicos (por ejemplo, para impresión 3D). En nuestra zona rural del Perú no hay recolección de residuos y poco acceso al reciclaje. Los lugareños en su mayoría queman su basura o la tiran al río o la jungla. No apoyamos el reciclaje, ya que creemos que promueve el consumo excesivo de material de embalaje que generalmente no se puede procesar en nuevos productos. La mayoría de los materiales reciclables no se reciclan realmente, sino que se introducen en procesos adicionales de clasificación y transporte, y eventualmente se convierten en vertederos.


Renovar: el reciclaje y la reutilización son formas de reciclar el material y casi siempre se eliminan. Si bien esto evita el uso de nuevos materiales y ahorra energía, simplemente está retrasando la eliminación. Por lo tanto, priorizamos el reciclaje (o renovación) de los materiales en formas igualmente útiles o más. Por ejemplo, los desechos orgánicos limpios como restos de comida, papel y desechos agrícolas se utilizan para alimentar a los animales (pollos, conejos y gusanos) o para hacer compost. Se está instalando un biodigestor de metano para tratar los desechos del inodoro y producir biogás para cocinar y agentes biológicos para la agricultura.
Recuperar: En un sistema holístico y cíclico ideal, los materiales de desecho serían devueltos al ciclo natural o al ciclo industrial para producir nuevos productos. Por ejemplo, el compost y los fertilizantes producidos a partir de desechos inorgánicos se devuelven al ecosistema para reemplazar los nutrientes que se tomaron en la forma del cultivo alimentario. Cerrar este ciclo de nutrientes y materiales es un concepto clave para lograr la autosuficiencia.